Las facturas forman parte del día a día como la garantía de una transacción, estas presentan características específicas para cumplir con esta legalidad. Es por eso que en el siguiente artículo podrás encontrar más información sobre cómo identificar una factura falsa y de qué forma se tramitan las facturas en el mercado.
Cuando compramos o vendemos algo es nuestro deber recibir o emitir la garantía de aquella transacción, según corresponda; y es que, se necesita un documento que acredite el movimiento financiero que se está realizando, el detalle el cobro del servicio o producto y que especifique los impuestos que se están agregando. Por esta finalidad se emiten las boletas para personas naturales, y las facturas para las empresas.
Las empresas contribuyentes son quienes deben emitir las facturas, según lo indica el Servicio de Impuestos Internos (SII). Para ello, deben tener vigente su trámite de inicio de actividades, pagar el IVA (en caso de que la factura lo contemple) y no hayan sido acusadas de delitos tributarios. En palabras más técnicas:
Para la emisión correcta de una factura, es necesario que contemples los requisitos que ha establecido la ley chilena para que esta sea totalmente válida, donde se aclara que debe contar con los siguientes datos:
Además, si la transacción requiere un despacho, a la factura se le agregará el número y fecha de la guía de despacho, la patente del vehículo destinado al transporte de carga, en el que se realizará el traslado, aunque la operación constituya o no venta. Y en el caso de las facturas emitidas por empresas expendedoras de combustibles deberán indicar la patente del vehículo en el que se está cargando el combustible.
Por otro lado, una factura falsa es aquella que “falta a la verdad o a la realidad de los datos contenidos en ella. La falsedad puede ser de tipo material, tales como indicar un nombre, domicilio, RUT o actividad económica inexistente, o bien registrar una operación inexistente, entre otras". Por esto, es muy importante que seas minucioso con revisar y corroborar los datos que se presenten en este documento, ya seas emisor o receptor de la misma.
Por otro lado, con la modernización de las finanzas, este documento también se adaptó para ser digitalizado, actualmente siendo la factura electrónica la que se utiliza en el mundo de los negocios, dejando atrás la factura tradicional en papel.
Desde 2014, con la Ley de Facturas Electrónicas las facturas pasaron a ser "un documento digital que tiene validez legal tributaria como medio de respaldo de las operaciones comerciales entre contribuyentes", la que principalmente establece que solo existen algunas excepciones para optar por la factura tradicional, tales como: desarrollar la actividad económica sin cobertura de datos móviles o fijos, no tener acceso al suministro eléctrico o que el área sea decretada como zona de catástrofe (conforme a la Leyº16.282).
De esta forma las facturas, liquidaciones facturas, notas de débito y notas de crédito, deben ser electrónicas para los contribuyentes. Por esto, para emitir tus facturas electrónicas, tu empresa puede optar por dos opciones según tus necesidades:
1. Sistema de Facturación Gratuito del SII: El SII te ofrece un sistema gratuito de facturación electrónica, el que permite la emisión de tus documentos tributarios.
2. Sistema de Facturación Propio o de Mercado: Como contribuyente, puedes adquirir en el mercado un software que te permita operar con factura electrónica o puedes desarrollar un software propio.
Cualquiera sea tu forma de operar, la factura electrónica te ofrece distintos beneficios, entre ellos: